El papa Caballo estaba debajo del morichal con una brisa que refresca la
sabana y la llena de roció en la madrugada, contándoles a sus dos potrillos
como Dios los creo, mientras ellos atentos lo miraban y escuchaban fijamente.
En el comienzo de los tiempos el gran Dios de los Caballitos dijo:
"Siento que tengo tanto amor que dar y no tengo a quien
dárselo", por lo que haré un ser semejante a mí en quien pueda dar todo mi
amor".
Y así fue como este ser supremo primero y último, hizo al primer
caballito a su imagen y semejanza.
Luego de algún tiempo vio Dios que era muy bueno y que tenía que hacer
otro igual para dar todo ese amor que aun sobraba a montones.
Y es así que para que fueran iguales durmió al primer caballito y saco
al segundo de la misma naturaleza del primero, pero al verlos a los dos descubrió
que si luego tendría que crear uno nuevo, Dios tendría que dormir a alguno de
los dos creados y el que quedase despierto uno de ellos sabría el secreto de la
creación y esto no puede ser dijo Dios.
Con lo cual se le ocurrió algo mejor y dijo para que no se peleen y que
ninguno tenga más conocimiento que el otro, haré que el don de la creación este
repartido entre los dos.
Y luego así nacerán unos serán mitad y otros serán mitad, y se unirán
solo cuando sientan AMOR que hacer y ese elemento más la llave y el universo serán
la clave de la creación.
Es así como al primer caballito le dio una llave que para que no la
perdiera la llevaría en su cuerpo a la altura de la cintura totalmente visible
y para distinguirlo lo bautizo con el nombre de varón.
Luego Dios con el otro ser como era la nueva creación, a esa criatura
dijo "A ésta le daré el universo en su interior también a la altura de la
cintura, en donde se gesten los caballos, y la bautizo con el nombre de hembra.
Y así entre los tres podremos poblar la tierra y hacer que el amor de
Dios este bien repartido, ya que es infinito.
Fue así como Dios creo a dos seres uno con el universo y otro con la
llave que abre ese universo, luego les infundio otra vez su amor para que
despertaran del sueño y les perjuro que cada vez que el necesitara que la
creación se pusiera en marcha les llamaría al oído y le pediría al varón que
abra el universo de la hembra y que diera a luz al amor.
De pronto y en medio de la historia que les estaba contando su papa a
los pequeñines, uno de ellos le pregunta al papa: ¿y entonces tú con tu llave
abriste el universo de mi mama para hacernos?, el con un inmenso orgullo respondió
si hijo mío así es tu naciste cuando Dios nos llamó y nos dijo necesito que mi
amor que es infinito este nuevamente en el mundo renovado y nos pidió que nos juntáramos
para abrir el universo y naciera el amor que eres tú.
Ahí y cómo es eso del universo papa, porque yo tengo amigos que no
tienen papa, ¿ellos también son amor? ¿A ellos un papa abrió el universo de su
mama y nació el amor, como tú dices?
Si hijo mío así fue, luego su papa, seguramente alguien lo dio una tarea
que cumplir y se iría a cumplir su tarea y la mama se ha quedado solita
cuidando el amor, hasta con la vida.
Por eso es que Dios les dio a las mamas el Universo porque son muy
buenas cuidadoras, y nosotros los caballos somos buenos trabajadores.
Y ahora a dormir
que este cuento se ha acabado.