miércoles, 6 de diciembre de 2017

Tucusito y la Cachama

Zassss, zassssss, zasssss sonaba cada vez que pasaba el pequeño Tucusito mientras en la laguna lo miraba la Cachama.

Como era de mañana la Cachama estaba tratando de ver que insecto o que larva estaba en el borde de la laguna para desayunar.

Llamo tanto su atención el pequeño Tucusito que aun cuando tenía hambre espero un rato para ver que hacia este.

La Cachama le hablaba al Tucusito, pero este iba de un lado a otro recolectando lo dulce de las flores que están en la orilla de la laguna.

Pero el Tucusito era rápido y no dejaba de pasar muy veloz sin poder quedarse un minuto a conversar con la Cachama.

De pronto el Tucusito logra darse cuenta de que la Cachama le estaba hablando y con su ala derecha logra saludarla, y pedirle disculpa por su falta de cortesía y mala educación en no responderle.

Le dice el Tucusito a la Cachama, amiga que pena no piense que soy un mal educado, pero es que al pasar tan rápido y al estar enfocado en mis tareas no preste atención que estabas tratando de conversar conmigo.

La Cachama quien es muy feliz y no se detiene en estar pensando nada mal de nadie, y comprende bien que los demás pueden estar ocupados, también la saluda la disculpa sin problema alguno y le pide que se detenga un momento para conversar.

El Tucusito ya disculpado le pregunta a la Cachama, de que quieres conversar ya es de mañana y hay que trabajar, no te parece que deberías estar trabajando a lo que la Cachama le contesta; si no paras un minuto te dará un infarto, te veo que vas y vienes sin parar mientras yo voy a desayunar y luego a revisar que hay que hacer en el trabajo.

¿No puedo creerlo dice el Tucusito como puede haber alguien sin una obligación? Explícame amiga como puedes vivir así tan lento tan sin saber que hacer sin una meta.

Amigo Tucusito, la vida es mas que estar ocupado e ir de un lado al otro, la vida tiene sus momentos, tu eres muy rápido podrías organizarte y hacer las cosas rápidamente y luego descansar, luego venirte aquí a la laguna y conversar conmigo un largo rato.

¿Pero de que vamos a conversar si no haces nada en el día dice el Tucusito?, pues que bien conversaremos de las cosas que tú haces, de como te fue que aventuras te han pasado en el día; que opinas? Dice la Cachama.

¡El Tucusito le dice que rara eres!  para que quieres saber que hago en el día, me estarás espiando?

No para que te estaría espiando, solo que me pareció que eras interesante y compartir contigo tus aventuras del día nos podrían alegrar la noche y así ser mejores amigos, nada más eso.

Pero si no quieres conversar de eso pues no importa yo te podría contar lo que pasa en la sabana, tengo muchos amigos y ellos me ponen al día con lo que pasa en tierra firme.

Ante esto el Tucusito le dice no quiero ser grosero, pero debo irme hasta la próxima, hasta luego; y se despide y se va.

La Cachama que tiene un gran corazón se despide, pero sin mayor problema se va a desayudar a sus labores y luego a descansar y disfrutar.

Pero el Tucusito que es bueno pero un poco acelerado aun que se había despedido y no había sido para nada grosero, le quedo en su interior una pregunta: Por que alguien quiere compartir conmigo mis cosas; ¿porque alguien desea perder su tiempo hablando conmigo? Eso no lo entendía y así paso varios días sin poder dormir bien y trabajando en el día pensando en que necesitaba ver a la Cachama.

Hasta que se dijo a si mismo no puedo más, voy a parar e ir a conversar con la Cachama, y así lo hizo termino rápido sus obligaciones y fue hasta la laguna y se quedó toda la tarde conversando, luego cuando ya era tarde se despidió de la Cachama y se fue a su casa, mientras cenaba sintió algo en su pecho una sensación de plenitud de llenura que nunca la había sentido, era tan placida esa sensación que dijo que es esto.

Al día siguiente va donde sus padres y conversando con ellos les cuenta lo sucedido su madre muy sabia le contesta hijo eso sucede cuando uno pone aun lado las preocupaciones y se dedica un rato para uno mismo; pero le dice el tucusito pero es que no entiendes mama yo no me dedique a mi ese tiempo se lo dedique a la Cachama.

Su padre se ríe y lleno de sabiduría lo abraza y le explica que la Cachama es una buena amiga pero que el gesto que ella tuvo para con el es para el mismo no para ella, le explica que cuando somos buenos y ayudamos a los demás no es para los demás es para nosotros mismos, y así sucede con nuestro propio ser tenemos que dedicarnos un tiempo y ese tiempo graciosamente fue con la Cachama.

Entiendo perfectamente ahora todo, cuando comparto con los demás no es que les hago un favor a ellos de yo estar con ellos me hago un favor a mi de compartir con la gente, que extraño, pero tiene un total sentido le dice y se va corriendo donde su amiga la Cachama.

Hola Cachama ahora entiendo todo lo que me has dicho estos días, ahora lo comprendo, la Cachama se ríe y le dice yo le debo el mismo favor al delfín pico de botella, así que sigamos aprovechando el tiempo.

Desde entonces comenzaron a ser los mejores amigos.

Y Colorín colorado este cuento sigue pintando tu cara de alegría, no rima, pero alegra.